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La victoria de Portugal en Eurovisión 2017 fue una sorpresa para todo el país, que aunque seguían el certamen, jamás habían seleccionado a un artista y canción que superara el sexto puesto. Gracias a su victoria, Sobral se ha convertido en todo un personaje público en su país, aunque para él, “Eurovisión y mi victoria quedaron en Kiev”. “Ahora busco nuevas e interesantes experiencias”, ha afirmado el artista.
En una entrevista, Salvador ha estado confirmando que ha perdido toda vida personal íntima que tuviera, y en este sentido, ha recordado una anécdota que le sucedió. Hace unas semanas estaba en una pastelería comiendo un croissant con queso, cuando una señora se le acercó para pedirle un selfie, y éste lo rechazó por tener la boca llena de queso. Sin embargo, Sobral se dio cuenta de que la señora comenzó a grabarle y el portugués se levantó de la silla y gritó: “Soy un animal de zoo”
“Para mí es un atentado a mi intimidad. Hacen que vienen a reconocer mi talento, pero realmente lo hacen por las fotografías”, explicaba a Fátima Lopes durante la entrevista. “Soy cercano con los fans. Firmo autógrafos, canto para ellos, y soy muy sensible por todo lo que percibo de ellos, lo que están sintiendo. Sin embargo, no entiendo este concepto de Selfie”, aclaraba.
“Cuando lo que cantas es verdad y lo sientes, la gente también lo va a sentir. Y esto es lo que sucedió en el Festival de la Canción de Eurovisión. Esa victoria quedó ya allí. Ahora estoy centrado en este increíble presente que estoy viviendo, aunque me han quitado la privacidad que tanto aprecio”, continuaba narrando Sobral.
Fuente: Observador | Redacción: Juan Calandria
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